Combinando patrones
Además de dar un sello personalizado, añadiendo color y
profundidad, la combinación de patrones
beneficia nuestro espacio. Siguiendo
estas pautas podremos evitar el desequilibrio.
Ten en cuenta que los diversos modelos y colores no
necesitan ser parecidos entre sí, sólo deben complementarse.
1. Elige un número impar de patrones.
Los números impares tienden a verse mejor, así que si vas a
jugar con los patrones, comienza con tres patrones diferentes en tres escalas
diferentes. Una vez que hayas dominado la clave de los patrones , trata de
hacerlo con cinco.
2. Utiliza diferentes escalas de modelo.
Incorporar diferentes escalas en el espacio para que los estampados no compitan entre sí. Siguiendo con la regla
de tres, elige un diseño grande, uno
mediano y uno pequeño.
Por ejemplo, prueba con
un estampado de flores /
hojas, uno geométrico mediano y uno pequeño de diseño clásico.
3. Los diseños grandes funcionan mejor en muebles grandes (
un sofá) y los patrones pequeños en formatos pequeños ( cojines)
Al elegir la ubicación de tus patrones, ten en cuenta el
espacio en el que se está trabajando. Un patrón general funciona mejor en un
espacio grande, tal como una pared, ventana o alfombra. Esto es debido a que el
espacio es lo suficientemente grande para acomodar el diseño en su totalidad. Un patrón medio se adapta
mejor a los muebles y un pequeño patrón como acento en piezas pequeñas. (Nota: A veces, los patrones pequeños pueden parecer sobrecargados cuando
se utiliza es una gran cantidad.)
4. Busca un diseño que incorpore todos los colores.
Para comenzar elijamos una combinación de patrones, si tu espacio tiene varios
colores en el mismo diseño, escojamos el patrón más grande, más audaz e
incorporar TODOS los colores en el esquema . A partir de ahí, elegir un patrón
diferente, de tamaño mediano (aproximadamente la mitad del tamaño del patrón
grande) y utiliza algunos de los
colores. Por último, el patrón pequeño, puedes utilizar sólo dos o tres de sus
colores. Una manera fácil de hacer esto es buscar una tela que coordine los patrones disponibles.
5. Puedes utilizar el patrón, incluso si tienes una
habitación monocromática.
Alternativamente, si tienes un solo color, juega con diferentes
tonos de color. Siempre y cuando varíes la
escala y el tipo de patrón, puede crear un look
muy coherente de patrones.
6. Considera agregar un color sólido a la composición.
No tengas miedo de incluir un color sólido para suavizar y conectar todo el conjunto.
7. Agrupa los patrones que tienen estilos similares.
Si tienes un estilo
definido en tu casa, piensa un poco
antes de elegir los tipos de patrones
que mezclaras. Los patrones tradicionales tienden a mezclarse más fácil con otros modelos tradicionales, no
así a las combinaciones con estampados llamativos y contemporáneos. Por ejemplo, los estampados tradicionales como flores, cuadros y damascos no siempre se mezclan fácilmente con diseños chevron o ikat( geométricos ) Esto no significa que no se puedan mezclar, de hecho, a veces, le da un aire diferente a la habitación. Solo hay que hacerlo cuidando
el balance.
8. El equilibrio es la clave. Esto incluye no sólo el balance
de los diseños que elegimos, también en todo el espacio para evitar una sensación de caos.
9. Seguir con un tono constante.
Dentro de la gama de colores que elegiste, que la paleta sea
de colores con intensidades consistentes. Por ejemplo si la paleta es en colores pastel, no mezcles
con colores estridentes.
10. Podría sonar contradictorio pero no tengas miedo de
romper las reglas.
A veces, los diseños y ornamentos complementarios se unen de una
manera sutil y no planeada, por lo que si se ve bien, atrévete.
Espero que estos consejos
te ayuden a convertirte poco a poco en
una experta . Sólo recuerda mantener la escala y el color.
